Miércoles 1 de Diciembre del 2010.
Muerte de tipo sicariato en Guayaquil
Los crímenes de Francisco Ochoa Antón y Pablo Sierra Martínez, quiénes tenían 22 años de edad, sucedieron el 29 de noviembre a las 20h00 en Guayaquil. Todo ocurrió mientras se dirigían a comprar pan a la panadería “Punto Caliente” ubicada en el bloque 5 de Bastión Popular. Estaban caminando en la vereda con otros amigos y pasaron 5 motos, las cuáles empezaron a disparar descontroladamente.
Los amigos, Cristian Andrade Palacios y José Fuentes Morales, quiénes estaban con los dos fallecidos al momento del crimen se encuentran sumamente apenados y sorprendidos de lo ocurrido, todavía no asimilan la pérdida de sus seres queridos y peor el hecho de haber estado ahí y seguir vivos. Aseguraron que la muerte de los 2 fue inmediata, los quisieron llevar al hospital lo más rápido posible pero aún así ya era muy tarde.
Ambos fallecidos recibieron un total de 8 balas, sin embargo Cristian Hernández, fiscal de turno, dijo haber encontrado 22 balas en el sitio del trágico acontecimiento. También confirmó que el lugar donde estuvieron es muy peligroso y no era el primer asesinato que ocurría ahí durante esa semana.
Minutos después de la tragedia, los familiares de los asesinados llegaron al lugar. El dolor y sufrimiento de todos era completamente notable, querían que se haga justicia. La tía del segundo fallecido Pablo Sierra llamada Rosa Torres dijo entre lágrimas: “Estoy segura que fue una venganza pero no sé porqué”. Luego se llevaron los cadáveres del lugar y ahora la policía está en busca de los responsables. “Vamos a hacer lo posible día y noche por encontrar a los asesinos”, fue lo único que dijo el jefe de la policía.
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